Es sabido por muchos que el yoga nos ayuda a calmar nuestro interior, equilibrando la mente con el cuerpo. Sin embargo, esta hermosa práctica tiene beneficios aún desconocidos para la sociedad. Por ejemplo, ¿sabías que con el yoga puedes trabajar tus miedos o inseguridades? ¡En Studio de Yoga Keep Moving te lo contamos todo!

El miedo nos paraliza, nos atrapa y nos hace sentir vulnerables. En muchas ocasiones, la ansiedad motivada por nuestros temores nos deja en un estado reactivo e inactivo. A través de una práctica consciente de Yoga podemos aprender a tomar conciencia del presento.

En este sentido, el yoga te ayuda a reconectar con tu  yo interior. Esto nos facilitará comprender nuestros sentimientos y pensamientos. ¡Procesarás de forma positiva tus emociones! Desde ese estado de calma, es mucho más fácil observar, aceptar y comprender los pensamientos.

En este post te traemos una selección de las posturas más indicadas para enfrentarte a tus miedos. Es muy importante que tu cuerpo se encuentre relajado a la hora de realizar la rutina. Especialmente los hombros y la espalda, que es donde se acumula la mayor parte del miedo y la ansiedad.

Asana del Guerrero

Esta postura se recomienda para el empoderamiento. Tiene gran capacidad de enfocar y estabilizar. Para ejecutarla, deberás partir de una posición de pie. Respira profundo y presta atención a tus emociones.

Toma aire y levanta los brazos hacia arriba. Exhala y lleva un pie hacia atrás. A continuación, flexiona tu rodilla contraria a 90º, centrando las caderas. Estira la espalda y respira. Mantén la postura medio minuto y repite tres veces.

Asana del Águila

Esta postura exige un nivel intermedio. No obstante, posee beneficios directos para nuestra fortaleza y seguridad. ¡Así que toca probar!

Para realizarla deberás colocarte de pie. Flexiona las rodillas y cruza la pierna izquierda alrededor de la derecha. Seguido, estira los brazos al frente y cruza el derecho por encima del izquierdo. Por último, dobla los codos. Mantén la posición 40 segundos. Realiza cuatro repeticiones y descansa.

Asana del niño

Para ejecutarla, recuerda llevar una respiración consciente y cómoda. Empezarás con las rodillas y manos en la esterilla. Coloca las manos debajo de los hombros y las piernas separadas a la altura de la cadera.

Exhala mientras te desplazas, dejando tu torso apoyado sobre tus muslos. Extiende los brazos y relaja el cuello. Realiza tres respiraciones seguidas y descansa.

Postura de la cobra

La postura de la cobra, también conocida como Bhujangasana, es una de las asanas más utilizadas en las sesiones de Yoga. Consiste en una extensión de la columna. Es perfecta para estirar toda la musculatura de la zona del abdomen, Además, suele utilizarse combinada con la postura del niño.

Para hacer la postura, túmbate boca abajo con las piernas estiradas y los pies unidos. Coloca las manos a ambos lados del cuerpo y los dedos apuntando hacia delante. Levanta la cabeza y estira hacia atrás. Mantén la postura 30 segundos y realiza dos repeticiones. ¡Recuerda mantener la respiración consciente es necesario!